Desde La Ribera Del Manzanares. Udinese.

Courtois dejó su meta a cero.

Justo el día que empieza la campaña electoral en España, el Atleti se marca, quizás, su mejor partido de la temporada. Cuando los políticos comienzan a pedir el voto, Manzano pide voto de confianza particular para su proyecto, y aunque esté feo que yo lo diga, el mío, mi voto, ya lo tenía. Probablemente me tendré que tragar mis palabras que ahora mismo son estas: Sin rubor afirmo que mi Atleti es una pequeña versión del Barça (Salvando todas las distancias esas que estáis pensando)... Y no se me lleven las manos a la cabeza los puristas porque esto hay que verlo, señores.

Y no me vale que el rival era mediocre: 2º en la liga italiana marcha.
Y no me digan que venía con suplentes: Con suplentes jugó en Udine y ganó 2-0.
Y no me cuenten que llovía y hacía frío, porque es verdad.

Es solo que el engranaje empieza a acoplarse, la idea a fructificar, el mensaje a calar y, por encima de todo, la pelota. Los italianos nos la entregaron igual que en el partido de ida, pero no por cortesía ni zarandajas, no, nos la dio porque no sabe que hacer con ella. Se demostró en cuanto Adrián abrió el marcador. Lentos, previsibles, con un solo punta al que de pronto cambiaron el guión. Es decir, pasó de tener que pelear solito, incordiar la salida y tal, a tener que pivotar de espaldas, devolverla con criterio y encima responsabilidad de mirar portería... demasiado cambio para un solo infante. Es lo que tiene que te derriben a los cinco minutos todo el trabajo defensivo de hoy y de la ida.

Diego Ribas celebra el tercero. Una obra de Arte.

Así es que fueron cayendo como fruta madura los goles. Otro de Adrián, de cabeza a pase del capitán A. López, y el tercero... Bueno el tercero, bueno, bueno!! Para ponerlo en las escuelas. Delicatessen. Con un Falcao generoso, un Adrián transmutado en Kiko Narváez y un Diego ejecutando. El culmen de la idea Manzano, ese viejo profesor vilipendiado el domingo anterior por unos cuantos que no saben ni quieren entender de que va esto. Al menos hoy se tuvieron que rendir a la evidencia y cerrar su bocaza.

Que seamos una versión mini del Barça no quiere decir que no vayamos a sufrir aun. Queda mucho trabajo para seguir automatizando movimientos. Soltar y pedir al espacio libre. Presionar con sincronía para robar donde haces daño. Y eso, que no se entrena y ya he comentado en otras entradas, que se llama actitud, ese rigor en todo lo que se hace que te hace temible ante el adversario... Poca cosa, ya veis, matices que se van corrigiendo con el trabajo diario.

Y la segunda mitad, más de lo mismo. Llegando con soltura y callando a los tres mil aficionados italianos que vinieron. Alguna ocasión clara más y algún acercamiento rival, lógico, pues sus cambios buscaron el gol del honor, que rozaron en un lejano disparo al larguero. Pero el tanto que llegaría sería el del Tigre en bonita jugada personal. Falcao trabaja a destajo, hoy no le hacía falta el gol para ganarse el jornal, pero no esta de más que nuestro killer anote, por aquello de la moral y tal.
Buen partido en definitiva. Faena de aliño como dirían los clásicos. Reencuentro grada-equipo. Liderato del grupo y afianzamiento moral y de conceptos. Próxima parada: Getafe, domingo 22:00 horas.