viernes, 10 de diciembre de 2010

Marta Domínguez.

Marta, Göteborg 2006.
Cuando parecía que el dopaje en el deporte español había tocado techo con el caso Contador, nos desayunamos hoy con otro escándalo descomunal. Nada menos que Marta Domínguez, la atleta palentina, es detenida por la Guardia Civil como implicada en una nueva operación anti-dopaje llamada "galgo"... Tiene guasa el que pone los nombres a estas investigaciones. Si a la del mundo del ciclismo la llamaron "puerto", a esta, con atletas implicados, la llaman como al veloz can... pero bueno, eso sería tema para otro post en un tono, quizás, más humorístico...

Lo que me ocupa es bastante más serio, pues Marta, considerada la mejor atleta española de todos los tiempos, se encuentra ahora en libertad por el hecho de estar embarazada, pero parece ser que todo apunta a un delito de... tráfico de sustancias dopantes!!! Gravísimo... Ya no es que tú te dopes para mejorar rendimientos, es que vendes a otros atletas. Con la nueva ley en la mano, estaríamos hablando de penas de cárcel. Muy fuerte. Y más con el currículum de ésta mujer: 14 metales (si no recuerdo mal) entre campeonatos europeos y mundiales, en pistas cubiertas y al aire libre y entre las pruebas de 3 y 5 kms. Es además la actual campeona del mundo en 3 kms obstáculos, en aquella mítica carrera de Berlín 2009 de la que nunca olvidaremos su sempiterna sonrisa varios metros antes de cruzar la linea.

Ufff!!! Reconozco que se me ha caído un mito. A mí y a muchos españoles más que veíamos a esta brava mujer correr desde hace mucho con su inseparable cinta de pelo. En su Palencia natal están bajo estado de shock, aunque como ocurre siempre en estos casos, unos defendiéndola a muerte y otros sospechando de sus últimos triunfos. Acaba de ser cesada de su cargo de Vicepresidenta de la Federación de Atletismo, lógico, y queda en suspenso hasta su nombramiento como hija predilecta palentina. Es como un mal sueño, y una pregunta ronda mi cabeza: Como una mujer con su estatus, en el ocaso de su carrera, a punto de ser madre, querida y respetada en el mundo del deporte, se pringa en un tema así??? No sé, quizás ahí esté la clave, quizás por todo eso sea un error de bulto y ella no debía estar en esa lista, aunque reconozco que esto último es más un deseo que una afirmación.

Mala espina da que aparezca en la lista, una vez más, Eufemiano Fuentes. Este tío que ya se libró de la "puerto" por la tibieza de la ley en ese momento, y que vuelve a reincidir, este tío especie de capo gallego de las drogas para deportistas, que de salir culpable, debería pudrirse en la cárcel por todo el daño que ha hecho a la imagen del deporte de nuestro país. Y son muchos más deportistas en la lista de la Guardia Civil, se habla de cerca de un centenar, y se empiezan a filtrar nombres muy, muy conocidos. Lo dicho, un escándalo del que no se si se va a recuperar el, ya jodido de por sí, atletismo español, y que hace que allá donde vayan  nuestros deportistas sean mirados con sospecha. Urge una resolución rápida de estos temas en los tribunales, pues cuanto antes se produzca la amputación, antes se producirá la regeneración. Para terminar quiero decir que todo esto está bajo secreto de sumario, es decir, nada es definitivo. Puede que dentro de un tiempo yo tenga que publicar aquí una nota desdiciéndome, o directamente, borrar el post. Ojalá, estaría encantado. Pero los antecedentes en casos parecidos me hacen pensar que todo esto está atado y muy atado porque de otro modo no se hubiera hecho público. Seguiré atento, mientras tanto, pase lo que pase, hoy es otro día negrísimo para el deporte español en general, y para el noble Atletismo en particular.

1 comentario:

  1. Pues si que es verdad que se nos ha caído un mito, o El mito, a casi todos los que amamos el deporte, en especial el atletismo, pero hasta que no lo prueben de forma tajante nos seguiremos agarrando a la presunción de inocencia, bien es verdad que pinta mal. Y como decía alguna compañera atleta, precisamente ella, que es la única que podía vivir bien del atletismo, en fin, una pena. La historia de Eufemiano Fuentes debería acabar ya en Memorias carcelarias, por favor.

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