Fotoperiodismo. Christine Spengler.

Khomeini.

En horario de trabajo me escapé ayer un rato al Centro de Arte Tomás y Valiente. De cuando en vez me gusta acercarme a este templo fuenlabreño a dejarme sorprender por sus programaciones. Es casi la única manera de saber que exponen, presentarse allí, pues está alejado de los circuitos del Arte de la capital, y la publicidad es nula. Nunca me ha defraudado. Invariablemente tienen tres expos en cartel, una, la principal, de calidad profesional, y otras dos que ofrecen a colectivos amateurs o grupos de artistas de la zona, y que, en muchas ocasiones, no desmerecen a la muestra principal.

Hoy vi la de una foto-reportera de guerra. Esa especie dentro del periodismo que se dedica a retratar los conflictos universales, esos amantes de la instantánea y del peligro a partes iguales. Y encima con Arte. Porque las fotografías son de una calidad extraordinaria, no en vano muchas de ellas han sido portada en diarios y semanarios de todo el mundo. La fotógrafa en cuestión, Christine Spengler, es una francesa criada en España que ha recorrido medio mundo con su cámara a cuestas: Niger, Chad, Irlanda del Norte, Vietnam, Camboya, Beirut, Marruecos, Argelia, sitios que en su época eran avisperos - Algunos aún lo son- y difíciles, muy difíciles, aún más para una mujer.

Londonderry, Irlanda del Norte.

Christine ha titulado su expo Luces y Sombras, y consta de dos partes diferentes. Por un lado sus trabajos  en blanco y negro, todos de Territorio Comanche, como diría Pérez Reverte, y de otro lado una serie de collages fotográficos a todo color que realiza cuando regresa de un reportaje, y que según ella: "Me permiten escapar de las pesadillas que me persiguen durante la noche y me han hecho reconciliarme, al fin, con los colores de la paz." 

On the road". Teherán